¿Por
qué rodean a la Virgen de manzanas?
Cabe destacar que es una tradición tan
arraigada, que en muchos lugares se le conoce como "La Virgen de las
manzanas":
Como parte de la tradición mexicana,
se colocan manzanas alrededor de la imagen de la Virgen de la Dormición, para
que la persona que la tome, recuerde que María está libre del pecado original.
Todos los hombres nacemos con éste pecado, el cual proviene del momento en que
Adán y Eva comieron del fruto prohibido. Con ese acto a la humanidad se le
cerró toda puerta que permita entrar al paraíso, pero con Cristo, el nuevo
Adán, y con María, la nueva Eva, han sido abiertas de nuevo, las puertas del
paraíso, y se revela el misterio de la Iglesia, como primicia de la humanidad
redimida por medio de su pasión y resurrección.
La palabra Asunción proviene del latín, y
significa “elevación de la Virgen desde la tierra al cielo”. La elevación de
María al cielo, la hace partícipe de la Resurrección de Cristo, a la vez que anticipa
la resurrección de los muertos al final de los tiempos.
El inicio de esta celebración tiene su origen
en el Oriente (siglo VI), donde se fija en esta fecha; después pasa a
Occidente, en el siglo VII. La Asunción de María, fue proclamada como patrona
de la Arquidiócesis Primada de México.
Asunción de María con Mañanitas
mexicanas
En lecho de manzanas olorosas
Estamos en la parroquia de la
Preciosa Sangre, de Puebla. A las 6 de la tarde, Víspera de la Asunción, se ha
reunido un grupito de fieles para honrar a la Virgen María.
Ante el altar hay una mesa
alargada, cubierta de blanco lienzo, flanqueada de cuatro lámparas prendidas.
Sobre la mesa manzanas, montones de manzanas, entre floreros de rosas, ramos y
alhelíes. En medio, e invisible para el devoto que está en la iglesia, una
imagencita de la Virgen Milagrosa Inmaculada, en posición yacente. En el suelo
dos canastas, una de manzanas, otra de granadas.
La imaginación vuela al cantar de
los Cantares, al lecho florido de la amada. Estamos celebrando una fiesta
nupcial, que es el tránsito de María, la Dormición de María, que es recogida
por su Hijo para participar ya ahora en la plenitud de la Pascua.
Si acaso las manzanas pueden
evocar las ofrendas de las primicias del campo en estos meses de recolección,
nos trasladan, más bien, al Jardín del Edén, donde nuestros padres
desobedeciendo comieron el fruto prohibido. Pero ya entonces apareció en
lontananza la Mujer vencedora de la Serpiente. Y la Inmaculada tenía que ser la
Asunta.
A las 11 de la noche entró la
rondalla de mariachis, y detrás un grupo fuerte de devotos, cantándole a la
Virgen las Mañanitas. Cantaron, cantamos todos; luego la Salve. El Párroco leyó
unos pasajes bíblicos, y bendijo las manzanas, las flores y las granadas.
A continuación dos niñas
levantaron a la Virgen, ya despierta. Después la tomaron en sus manos y todos
pasamos, uno a uno, para entregar a María un beso de amor. Los cantores seguían
entonando canciones a María. Salimos de la iglesia y a la puerta nos aguardaban
las mujeres brindándonos un te calentito…, si no era el ponche cocido de la
tierra con canela, caña, tejocote, tamarindo, ciruela y lo demás.
Había empezado la fiesta de la
Asunción de María a los cielos.
En lecho de manzanas olorosas
está la Inmaculada y se dormía;
así se fue, así se despedía
de sus hijos entre blancas rosas.
Los ángeles con alas temblorosas
velaban la pureza de María;
de luz y gracia Eva se vestía
y Adán vio renacer todas las cosas.
Vinieron a cantar las Mañanitas
los amantes de Pascua, a su Señora;
traían de regalo el corazón.
El cielo era de agosto, de estrellitas;
levantaron la imagen cual aurora;
se alzó la Virgen: era la Asunción.
está la Inmaculada y se dormía;
así se fue, así se despedía
de sus hijos entre blancas rosas.
Los ángeles con alas temblorosas
velaban la pureza de María;
de luz y gracia Eva se vestía
y Adán vio renacer todas las cosas.
Vinieron a cantar las Mañanitas
los amantes de Pascua, a su Señora;
traían de regalo el corazón.
El cielo era de agosto, de estrellitas;
levantaron la imagen cual aurora;
se alzó la Virgen: era la Asunción.
La
imagen se rodea de manzanas por tradición, sin embargo, como toda tradición
esta tiene un origen.
Se dice
que cuando la Virgen quedó dormida, el cenáculo comenzó a desprender un aroma a
flores y manzanas, o también “al manzano”, colocar las manzanas nos recuerda el
momento en que María queda dormida. “Como fuente escondida que da aroma a las
flores y frescura a los frutos. Eres jardín cercado, manantial sellado” (Cantar
de los Cantares 4, 12) Otro significado es que la muerte se acercó a ella pero
nunca la pudo tomar suya, es decir, la manzana que representa al pecado, el
pecado que tiene como consecuencia la muerte, debe doblar las rodillas ante
solo escuchar el nombre de la Virgen María, ella vence al pecado, la rodean de
manzanas para recordar eso.
Recordemos también que en el arte sacro, se
utilizó la manzana para representar a la Virgen María como la “Nueva Eva” o
“Nueva Madre de los hombres”.
Sin embargo, un integrante de La Legión de
María me dotó con un significado distinto, citó a su manera el (Génesis. 3,15),
“…Haré que haya enemistad entre ti y la mujer, entre tu descendencia y la suya.
Ella te pisará la cabeza mientras tú herirás su talón” es decir, la Virgen
“encima” de las manzanas es que ella pisará el pecado siempre, eternamente,
significado parecido pero no idéntico a otro mencionado anteriormente
Las
manzanas rodean a la Virgen y al finalizar la procesión del día 14 de agosto
son bendecidas por el Sacerdote que preside, luego se le entregan a los
asistentes al salir del templo.