martes, 14 de febrero de 2017

- Guanajuato, la ciudad y sus túneles

La capital del estado de Guanajuato ha sido nombrada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y es una encantadora ciudad de la época colonial situada en un pintoresco valle, rodeado por las montañas de la Sierra de Guanajuato. 
Su sobrenombre, “lugar de las ranas”, se debe a que para los primeros habitantes de la ciudad, la forma de su terreno montañoso era similar a la de una rana.
 A esta región se le conoce como el Bajío, o el corazón de México.
Teatro en el centro de Guanajuato




Fundada en 1559, Guanajuato es una antigua ciudad hogar de la mina La Valenciana. La plata fue descubierta por primera vez en Guanajuato a mediados del siglo XVII. La Valenciana fue explorada un siglo más tarde y se convirtió rápidamente en una de las minas más ricas y productivas del mundo. 


El Templo de San Cayetano, que se encuentra a un lado del yacimiento, se erigió como monumento a la abundancia y las riquezas extraídas de la mina.

Entrada a la Mina
En el Centro de Guanajuato, las arboladas plazas están llenas de cafés al aire libre, museos, teatros, mercados y monumentos históricos. Los edificios de la ciudad son un excelente ejemplo de la arquitectura colonial de estilo neoclásico y barroco. 


El centro histórico de Guanajuato tiene un distintivo sabor europeo, con cientos de callejones empedrados que suben y bajan por la ladera. 





Las arboladas plazas están llenas de cafés al aire libre, museos, teatros, mercados y monumentos históricos. Los edificios de la ciudad son un excelente ejemplo de la arquitectura colonial de estilo neoclásico y barroco. 
Una red de túneles subterráneos corre por debajo de la ciudad para ayudar a controlar el flujo del tráfico.


Los habitantes más antiguos del estado, según estudios recientes, pudieron haber sido los chupícuaros; a la llegada de los españoles, los purépechas, los otomíes y los chichimecas eran los pueblos que habitaban la región.
El hecho más significativo de la historia estatal, fue el ocurrido la madrugada del 16 de septiembre de 1810. En un pequeño pueblo de Los Altos, llamado Dolores (hoy Dolores Hidalgo), donde el cura Miguel Hidalgo y sus colegas independentistas se levantaron en armas contra el régimen virreinal, lanzando el llamado Grito de Dolores. Ya consumada la independencia iniciada por Miguel Hidalgo, el territorio se convirtió en un estado libre y soberano por decreto del 3 de febrero de 1824.
Conocida como la cuna de la Independencia de México, esta ciudad es una importante parada a lo largo de la Ruta de la Independencia, la cual también pasa por Dolores Hidalgo y San Miguel de Allende. Recorre la Alhóndiga de Granaditas, un edificio y monumento histórico ubicado en el centro de la ciudad, y el sitio donde tuvo lugar la primera gran victoria sobre los españoles en 1810.
Iglesia de la Valenciana o de San Cayetano  del siglo XVIII, que se encuentra cerca de la entrada a la mina de plata La Valenciana, ubicada en proximidades de la ciudad de Guanajuato La iglesia se yergue en la cima de una colina frente a la ciudad, y es una muestra de la inmensa riqueza extraída de la mina de plata durante el periodo colonial. En su época, La Valenciana fue una de las minas con mayor producción de plata del mundo. 
La iglesia fue construida por el minero Antonio de Obregón y Alcocer, quien llegó a ser uno de los dueños de La Valenciana. La construcción comenzó en 1775 y finalizó en 1788, excepto por algunos detalles y una torre del campanario con su reloj del lado derecho, que nunca se llegó a completar.
La iglesia, de planta de cruz latina, se construyó con una piedra rosada denominada "cantera rosa". Su fachada está tallada en estilo barroco mexicano, y las ventanas laterales tienen arcos de estilo neo-mudéjar.
Su interior está muy ornamentado con retablos dorados en el altar, tallas, un púlpito con incrustaciones de marfil y maderas preciosas, y enormes pinturas del siglo XIX. Entre las figuras que aloja se destacan las de san Nicolás Tolentino (patrón de los mineros), y san Ignacio de Loyola (patrón de Guanajuato).
Guanajuato es una ciudad de leyendas y de lugares legendarios. Uno de los más conocidos es el famoso Callejón del Beso, un lugar tan estrecho en el que las parejas pueden besarse desde balcones opuestos. 
No podemos dejar de participar en una callejoneada, o serenata a pie, dirigida por músicos estudiantes que, acompañados con guitarras, dan serenata a los ahí presentes y cuentan historias locales.


La ciudad alberga anualmente al Festival Internacional Cervantino, un evento de artes escénicas nombrado en honor de Miguel de Cervantes Saavedra, autor de Don Quijote de La Mancha. 
También encontraremos un museo dedicado al Quijote, estatuas de él y de su fiel escudero Sancho Panza, en la Plaza Allende, justo afuera del Teatro Cervantes.


Se encuentra la casa del famoso muralista mexicano Diego Rivera, nacido en este estado, que ha sido convertida en un excelente museo. 

 La ciudad es también hogar de una gran población de estudiantes, muchos de los cuales asisten a la Universidad de Guanajuato, una de las universidades más antiguas del estado.


Guanajuato es un lugar ideal para degustar la cocina regional del Bajío. Entre los platillos locales favoritos se encuentran las enchiladas mineras (tortillas rellenas de carne, frijoles o queso y cubiertas con una salsa de chile guajillo y chile ancho) y las pacholas guanajuatenses (carne molida con especias).
Las momias de Guanajuato son un conjunto de cuerpos momificados naturalmente, las cuales han sido descubiertas después de la exhumación en tumbas del cementerio de Guanajuato, Siendo actualmente una de las mayores atracciones turísticas de ese estado mexicano, las momias son exhibidas en el “Museo de las Momias de Guanajuato”.
En la actualidad son más de cien las momias que forman parte del inventario del museo. Cuenta con una exhibición temática que anualmente atrae cientos de miles de visitantes
Fue en el año de 1865 que del Panteón de Santa Paula se exhumó el primer cuerpo momificado, ya que la fosa en la que yacía no tenía registrados los pagos pertinentes, correspondiente al cuerpo del médico francés Dr. Remigio Leroy.
Desde entonces y hasta 1958 continuaron los descubrimientos de cuerpos momificados debido a las especiales condiciones del subsuelo del lugar, sumadas a la presencia de nitratos y alumbre. Según el sitio de internet del museo se cuenta son 111 cuerpos de mujeres, hombres y niños momificados los que conforman la colección del Museo de las Momias de Guanajuato, todos exhumados entre 1865 y 1989
Hotel Castillo Santa Cecilia, construido como un castillo medieval, se halla ubicado la ciudad de Guanajuato, en el Camino a La Valenciana, Km 01 Colonia San Javier; 
se encuentra en una calle sinuosa en la falda de una colina, a 1,3 km de la Alhóndiga de Granaditas, el Museo de Arte e Historia, y a 2,3 km del Museo de las Momias de Guanajuato.
Las habitaciones son elegantes y tienen televisiones y escritorios. Algunas incluyen camas con dosel, techos de ladrillo abovedados o mobiliario de estilo antiguo.




El hotel incluye un restaurante refinado y un bar con terraza, así como una piscina exterior, un jardín, un patio con fuente, un parque infantil y una capilla en las instalaciones
La historia del Castillo de Santa Cecilia se remonta algunos siglos atrás, cuando originalmente los terrenos donde se ubicaba pertenecían a la hacienda de beneficio de San Francisco Javier hacia el año de 1686, cuyas instalaciones de laborío estaban donde hoy es la colonia San Javier; ahí cientos de trabajadores bajo órdenes del Virrey de la Nueva España realizaban las labores de beneficiar metal que era llevado procedente de algunas minas cercanas. Con el tiempo y el avenimiento de nuevos métodos de laborío, las condiciones y conformación de la hacienda fueron cambiando lo que originó la decadencia de este centro de trabajo y su producción minera se redujo al mínimo.
Sería hasta muchos años después cuando la hacienda de San Francisco Javier vendría a recuperar parte de su antiguo esplendor y el 27 de octubre de 1881 es visitada por el General Porfirio Díaz y el gobernador Manuel Muñoz Ledo, quienes elogian la forma como se trabajaba. En la mina se les pesaba a la entrada y a la salida, para comprobar que no se cargaran ni un gramo del metal que se producía. El Gral. Díaz peso exactamente lo mismo al entrar y al salir, no así otros personajes que le acompañaban.
Lamentablemente comenzó a decaer en todo Guanajuato la producción minera y muchas de las haciendas de beneficiar metales desaparecieron o disminuyeron sus actividades. Parte de las instalaciones de la hacienda San Francisco Javier fueron acondicionadas para brindar varios servicios y así para 1916 se convierte en albergue y hospital, permaneciendo un año en estas condiciones, hasta que fue completamente cerrada.
La propiedad fue adquirida por Don Manuel Quezada Brandy. Esta incluía además una gran extensión de terreno, donde incluso estaba un tiro de mina ya abandonado, conocido como “Santa Cecilia” y así fue como el 17 de mayo de 1951 comenzó a construir un hotel con las características de un castillo medieval.
Inaugurado en 1952 la fama del hotel creció, dado que ahí se hospedarían importantes personalidades al tiempo que se efectuaban fastuosos bailes y ceremonias en sus salones, a donde asistían políticos, artistas de fama internacional, así como lo más selecto de la sociedad Guanajuatense.
Manuel Quezada Brandy inicio el hotel en su primera etapa con la construcción de 20 habitaciones, en una segunda etapa Don Ricardo Orozco creció el hotel a 80 habitaciones y en la actualidad Alfonso García y su familia lo han reacondicionado en todas sus instalaciones y aumentado el total de habitaciones a 110 unidades.

https://www.tripadvisor.com.mx/Attractions-g150799-Activities-Guanajuato_Central_Mexico_and_Gulf_Coast.html