sábado, 29 de julio de 2017

- Pirámide "El Cerrito"

Pirámide del Gran Cué (El Cerrito)
A tan sólo 7 Km., del Centro Histórico de la ciudad de Santiago de Querétaro se localiza el principal Centro Ceremonial Prehispánico del Bajío, principal asentamiento religioso de la población Prehispánica que ocupó el valle de Querétaro.
El Cerrito fue un importante centro político y religioso, que operó como regulador de la población regional. La zona arqueológica de El Cerrito, también conocida como la "pirámide de El Pueblito", es un magnífico ejemplo de la influencia que llegó a tener la cultura tolteca en el área.
La arquitectura monumental tolteca de El Cerrito integró dos tipos arquitectónicos de construcciones, el patio hundido y los palacios o salas con columnas.
Llamada "Piramide de El Cerrito o del Pueblito" cuyo nombre original es "Piramide del Gran Cue";es una gran plataforma alargada, derrumbada y cortada en su parte media por la calle de acceso. Como parte de la pirámide se encontraron muros de estructuras principales, esculturas de Chac Mool y de atlantes o columnas.
La plataforma mide 130 metros de largo por 30 metros de ancho, desconociéndose la altura, por el grado de deterioro que presenta. La base de la cara sur mide 83.21 por 83.75 m en su cara oriente. “Presenta escalinatas con alfardas en sus cuatro caras. Los muros de fachadas fueron construidos utilizando piedras de basalto, combinado con sillares de arenisca y calizas pequeñas. Los muros de fachada y las escalinatas estuvieron recubiertos por una capa de estuco, la cual estuvo pintada en su momento con colores rojo, ocre y azul”.

Se construyó sobre una plataforma de nivelación de 118 metros por lado. Sobre de esta inicia formalmente la pirámide, la cual alcanza 30 metros de altura. Formada por trece pequeños cuerpos escalonados en talud, se utilizaron piedras de basalto y arenisca roja, para finalmente ser recubiertos con estuco y pintados en colores rojo y ocre. En cada una de sus caras tenía grandes escalinatas delimitadas por alfardas.
Las estructuras que forman el conjunto prehispánico de El Cerrito fueron construidas sobre suelos poco profundos con afloramientos de roca.

En los alrededores existen suelos profundos, de textura fina y color oscuro, con materia orgánica. Estas características de fertilidad, las condiciones climáticas y la disponibilidad de agua, permitieron en la antigüedad, agricultura intensiva, para el sustento de la población regional. En ellos crece flora silvestre que perdura hasta nuestros días con especies como mezquite, huizache, xixiote, nopal, órgano, garambullo, granjeno, tullidora, sangregado, sávila y diversos pastos

la enigmática e imponente Zona Arqueológica de El Cerrito, que no solo es el centro ceremonial prehispánico más importante en el Valle de Querétaro si no del bajío, tuvo influencia de la Cultura Chupícuaro, Teotihuacana, Tolteca, Chichimeca y Otomí..

Entre la Plaza de las Esculturas y la de la Danza, se construyó un palacio en donde fueron encontrados pequeños altares con abundantes ofrendas asociadas a braseros de barro de casi un metro de altura. Este palacio, además de dividir el espacio generó un ambiente de privacidad en las plazas, necesaria a sus funciones rituales.
La fachada hacia cada una de las plazas estuvo formada por un pórtico, esto es un área techada y sostenida por columnas de madera, decorada con coronamientos con piedra y estucos pintados en rojo y azul. Como lugar de culto, fue venerado por las culturas locales (Chupícuaro), y por teotihuacanos, toltecas, chichimecas, otomíes y tarascos, en épocas tan tardías como 1632.
Desde el año 300 aC., con la llamada cultura de Chupícuaro y posteriormente con la teotihuacana y la tolteca, continuando con el poblamiento chichimeca y otomí, inmediatamente anterior a la llegada de los españoles a este Valle de Querétaro.
Hacia el año 400 dC., el altépetl, centro ceremonial y su zona urbana prehispánica, surge como cabecera política y religiosa de un conjunto de asentamientos periféricos.
El Cerrito tuvo una larga permanencia como centro político y religioso regional, siendo contemporáneo de Teotihuacán y Tula. Como capital regional, tuvo una serie de asentamientos religiosos y habitacionales, conjuntos urbanos en el Cerro Gordo, Balvanera, La Magdalena, Santa Bárbara, La Negreta y las márgenes del río El Pueblito.
El Cerrito funcionó como centro político y religioso regional de gran importancia regional, desde el año 400 al 1500, de la era cristiana. El auge se da en el Postclásico, del año 450 al 850 d. C., cuando este centro urbano estuvo vinculado a la cultura tolteca. El período más intenso de ocupación se asociado a la cultura tolteca, en el Posclásico Temprano (900 a 1200 d. C.). El Cerrito es uno de los sitios más importantes del mundo tolteca, una Tollan o sitio en donde se legitimaba los vínculos de poder de los grandes señores y guerreros de la región. Es muy posible que a través de estos rituales se mantuviera la reproducción de la cosmogonía tolteca.
Con el tiempo, El Cerrito se convirtió en un espacio sagrado o santuario. Los edificios y altares alrededor de la pirámide son expresiones de actividades religiosas en torno al culto de una deidad femenina, muy seguramente la Madre Vieja o Madre de los dioses.
Durante esa época, pasó de ser un centro ceremonial local a un santuario de alcance regional. Piezas de cerámica encontrada (vasijas, figurillas y malacates) dan evidencia de redes comerciales con regiones tan lejanas como Tajumulco en Guatemala, la Huasteca en el Golfo de México y Los Altos de Jalisco al norte.
 Alrededor del año 1200 d. C. los grupos toltecas se retiran del valle disminuyendo, en consecuencia, el uso interno del centro ceremonial. Durante el Posclásico Tardío las diversas etnias que siguieron viviendo en el valle utilizaron parcialmente el sitio para sus ceremonias, esencialmente la pirámide. El cerrito ya no recuperaría su esplendor alcanzado con los toltecas, pero su reconocimiento como espacio sagrado, abierto al culto a una deidad o deidades prehispánicas se prolongó hasta entrado el siglo XVII.
A la llegada de los españoles estuvo poblado por chichimecas, con culturas sedentaria y semi-nómada, a los que se habían agregado los otomíes y tarascos.
Según registros franciscanos (1632), nativos chichimecas, otomíes y tarascos continuaban dejando ofrendas en los altares. Ellos colocaron una imagen de la virgen María dentro del recinto, para transformar el culto prehispánico mantenido en el sitio por más de mil años.
Una peculiaridad de El Cerrito es 'El Fortín'; un monumento histórico del siglo XIX que remata su basamento piramidal construido en 1876 con un concepto arquitectónico curioso: planta de tipo militar con puertas y ventanas neogóticas.


- Hacienda: Misión San Gil

Hotel Misión San Gil Querétaro
Esta hacienda elegante del siglo XVI está situada en el distrito San Gil de Querétaro y presenta detalles decorativos típicos del estilo colonial mejicano y comodidades exclusivas. Este elegante hotel se encuentra en un edificio de piedra de la época colonial, a 3,1 km del Club de Golf San Gil y a 11 km del Puente de la Historia, una puerta de la ciudad del siglo XVIII.
El Misión San Gil ofrece una variedad de actividades que incluyen piscina al aire libre, campo de golf, pistas de tenis y voleibol y un jardín frondoso.
Hotel Misión San Gil Querétaro le ofrece hospedaje de primer nivel lejos del bullicio citadino, en una hacienda donde aún se respira la época virreinal, disponiendo de todas las comodidades de un hotel moderno que exigen los grupos de trabajo para reuniones exitosas, las parejas para sus bodas o los viajeros que desean un oasis de relajación. 
Nuestro hotel cuenta con 124 Habitaciones Estándar y 10 Suites, con servicios y amenidades de primera clase. Además pone a su disposición 9 salones y áreas de eventos con capacidad de 20 hasta 1000 personas, con las amenidades que garanticen que su evento social o reunión de negocios en Querétaro será un éxito, nuestro personal está listo para ayudarlo con la organización.
En nuestras instalaciones usted encontrará restaurante, alberca, sala de masajes, campo de golf de 18 hoyos, canchas deportivas, deportes extremos, área de fogata, áreas infantiles, kiosco, palenque y más, lo que nos coloca como uno de los hoteles en Querétaro más completos en servicios y amenidades.
Nuestro Hotel en Querétaro, cuenta con una localización inmejorable, cercano a centros artesanales y recreativos como Tequisquiapan y Bernal. Además, se ubica a 25 minutos del Aeropuerto Internacional de Querétaro y a 1 hora y media de la Ciudad de México.

El restaurante La Mansión sirve cocina internacional exquisita con especialidades mediterráneas y mejicanas. Todas las mañanas ofrece un desayuno bufé y cuenta con menús a la carta para almorzar y cenar. El establecimiento también alberga 3 bares. 
Habitaciones con decoración acogedora, suelos de baldosas, techos con vigas de madera y televisión por cable. Las suites también disponen de vistas al jardín y bañeras de hidromasaje.
El hotel sirve un desayuno buffet por un suplemento. Hay un restaurante de cocina mediterránea e internacional elegante con un bar, un bar junto a la piscina y una cantina rústica que ofrece aperitivos y música en directo. Entre sus servicios se incluyen una piscina exterior, un jacuzzi, un campo de golf de 18 hoyos, una zona para hacer hogueras y parques infantiles.
“El hotel es hermoso, lleno de detalles y arte. El caminar con pavorreales es relajante. La comida del restaurante es deliciosa y de muy buena calidad con excelentes precios.”

Es un lugar hermoso con muchos detalles, pasillos muy típicos de las haciendas de antes y cuadros muy bonitos. Los jardines están excelentemente cuidados lo cual te inspira mucha confianza para caminar entre ellos tanto de día como de noche.”

jueves, 27 de julio de 2017

- La Virgen de El Pueblito

*la Virgen de El Pueblito, es una imagen de la Virgen Maria que tiene a sus pies a San Francisco de Asís arrodillado, sosteniendo la Imagen y que se encuentra en el Santuario que lleva su nombre.
La cabecera Municipal de Corregidora es El Pueblito, lugar lleno de tradiciones religiosas en donde las festividades abarcan todo el año, 
empezando por el día de reyes, fecha en la que se festeja al niño Jesús, en el mes de febrero son las fiestas de la virgen de El Pueblito, con su tradicional paseo del Buey, celebración en la que participa toda la comunidad, siguiendo con las tradiciones de más de 500 años,
La Virgen de El Pueblito es un icono a nivel del Estado de Querétaro, y cotidianamente se tienen peregrinaciones a su santuario, es venerada por el gremio de los transportistas, quienes vienen de diferentes estados de la República a visitarla.
En honor a la Virgen del lugar existen personas con el nombre personal de:"Pueblito". Cosa que cae de extraño a los foráneos.
Una de las devociones más arraigadas de la región se dedica a la Virgen de El Pueblito, imagen que se encuentra en el Santuario que lleva su nombre: el interior del Santuario tiene piso de piedra de San Andrés, el hermosísimo altar, la catedral, el trono y el piso de la Capilla Votiva.

Esta imagen es venerada por todos los peregrinos que llegan hasta su hermoso Santuario que se caracteriza por una austera elegancia que arropa a todos los fieles que acuden a visitar a la Patrona de los queretanos como señal de agradecimiento.
Durante el mes de febrero, acuden cientos de peregrinos a visitar a la Virgen de El Pueblito; esto sucede una semana antes del Miércoles de Ceniza, cuando se realizan las fiestas de la Coronación.
En el mes de febrero son las fiestas de la virgen de El Pueblito, con su tradicional paseo del Buey, celebración en la que participa toda la comunidad, siguiendo las tradiciones de más de 500 años.

Como parte de las festividades en honor a la Virgen del Pueblito, habitantes del municipio de corregidora realizaron el tradicional paseo del buey, cientos de personas participaron en el recorrido que se realiza antes de sacrificar a los animales, la carne es utilizada para la elaboración del caldo que se comparte entre la población. 
Con más de 278 años de tradición esta actividad continua vigente entre los habitantes quienes festejan a la virgen del pueblito. “…para nosotros es todo un honor que tengamos visitas de todos lados, desde niño mis papas nos enseñaron esta tradición que es muy bonita y ante todo de nosotros los de corregidora quienes festejamos a nuestra virgen…”.
Lucio Hernández, habitante de Corregidora. El recorrido se realizo por las diferentes calles del pueblito, al final los animales reciben la bendición por parte de los párrocos del lugar para luego llevarlos a sacrificar; en punto de las 09:00 horas, se realizará la tradicional bendición y el Paseo del Buey, inician en el atrio del santuario de Nuestra Señora de El Pueblito (calle Pedro Urtiaga,. 27).

Fue interés del arzobispo de México y del Cura de Querétaro la construcción de este Santuario-Convento, lo mismo que el Ayuntamiento, de modo que el Rey libró la Cédula Real en Aranjuez (España) el 26 de Mayo de 1765 para levantar el convento. Fue levantado en terrenos propiedad de los mesoamericanos, quienes no permitieron que el Hacendado de Balvanera José Ponciano de la Campa los compensara con otros terrenos. 
La obra duró diez años y su primer guardián fue el Fraile Daniel Doncel y tuvo vocación desde el principio del noviciado.En julio de 1914 el convento y la huerta pasaron a poder del gobierno y hasta 1943 se obtuvo la devolución de todo el convento y la huerta anexa y para 1949 estaba restaurada para servir nuevamente de noviciado.
Este convento con una muy larga barda almenada nos depara gratas sorpresas como son los dos arcos que dan entrada al Portal de Peregrinos, las trece ventanas de la planta alta y la puerta de trabajo, la primera da paso al patio principal que está enmarcado con cuatro corredores flanqueados de cuatro arcos de medio punto por cada lado y la parte alta sólo presenta ventanales que encierran los corredores de bóveda corrida y pinturas vegetales.
A la entrada a este patio encontramos del lado izquierdo una capilla devocional donde alguna vez lucieron los exvotos llevados por los peregrinos a ese recinto sagrado, este patio da entrada por el lado derecho a la antesacristía. Frente a la sacristía ahora llamada Capilla del Santísimo, del lado derecho a la Capilla de la Pasión y en la siguiente entrada de ese mismo lado al crucero del Santuario, por el lado izquierdo se entra a unas escaleras interiores que conducen al Claustro y en la planta baja a un patio de servicio donde podremos admirar un pozo de época y un contrafuerte que nos indica la resistencia de los muy gruesos muros que tiene este edificio.
Por el lado izquierdo del patio barroco y principal existe en el centro una fuente monumental con cinco escalones y ochavada, al centro una columna con una concha que hermosea este patio. Se entra por este patio a la planta alta del claustro por una escalera mientras que la parte baja da acceso a la Sala de “Profundis” al Refectorio y al Patio de Trabajo.
El Patio de Trabajo conduce hacia la entrada de la huerta donde se encuentran dos arcos que por medio de canales conducen el agua de las azoteas de todo el edificio a un aljibe, todos estos implementos de servicio dan un reconocimiento a la arquitectura del Siglo XVIII en que fue construido este edificio. 
El Capitán Pedro De Urtiaga, devoto de esta imagen encargó a su hijo el coronel José de Urtiaga construyese el templo. En el año 1632, el Reverendo Padre Fray Sebastián Gallegos esculpió con sus propias manos esta imagen, que representa el Misterio de la Inmaculada Concepción, la cual mide aproximadamente 55 centímetros de altura.
El Arzobispo Manuel Rubio Y Salinas, al declarar la conveniencia de fundar un convento junto al santuario de la Virgen del Pueblito que en ese entonces era ayuda de la parroquia de San Sebastián en el Pueblito, está de acuerdo que allí se retenga a la imagen, pero que los frailes se comprometan a levantar una Iglesia como se hizo y existe en la actualidad. 
El nuevo templo  con un trono magnífico para Nuestra Señora del Pueblito se estrenó el 5 de febrero de 1736. 
En el año de 1910 se amplió el santuario agregándole el camarín y el ciprés que alberga a la Virgen, se ampliaron los ventanales  y se colocaron hermosos emplomados, un magnifico órgano Walter y consagrada por el Obispo de Querétaro Manuel Rivera Muñoz.